lunes, 29 de marzo de 2010

MODELO DE LECTO ESCRITURA
Fuente: orientaciones para la SEP

Desde lo acumulado debemos avanzar hacia una mirada más integral del lenguaje:
En relación con la enseñanza y desarrollo del lenguaje en los programas de estudio, se plantea un enfoque equilibrado que implica integrar las estrategias propias del “modelo holístico” con las estrategias propias del “modelo de destrezas”, donde prima el paradigma comunicativo.
El lenguaje deja de ser estudiado sólo como una “materia de estudio” y se opta por enfatizar su uso funcional: los niños y niñas desarrollan competencias lingüísticas dentro de situaciones comunicativas auténticas y con variados propósitos. Dicho de otra manera: el énfasis del área del lenguaje está puesto en su desarrollo como facultad y no como el estudio del sistema de la lengua.
En síntesis, el Modelo o enfoque Equilibrado (o Modelo Integrado) se caracteriza por:
• Los alumnos aprenden a leer a partir de textos completos y significativos para ellos.
• La actitud que caracteriza al alumno, desde las primeras etapas del proceso de aprendizaje de la lectura y de la escritura, es la de construir y comunicar el significado de lo que lee y escribe.
• Las destrezas de lectura, tales como el aprendizaje de la decodificación, el desarrollo de la fluidez lectora, siempre se desarrollan dentro de una situación de lectura con sentido.
• Los textos se relacionan con la cultura oral de los alumnos, con sus experiencias, intereses y necesidades.
• Los alumnos tienen siempre un propósito definido para leer y para escribir. Ellos son capaces de explicitar el motivo por el cual leen: para entretenerse, para informarse sobre algo que les interesa, para recordar cómo se prepara una receta, para conocer una noticia del periódico, etc. Del mismo modo, cuando producen textos escritos, ellos tiene un destinatario y una intención comunicativa auténtica.
• Los tipos de textos utilizados para el aprendizaje y el desarrollo de la lectura y la escritura corresponden a las diferentes funciones del lenguaje. Los alumnos leen y producen cuentos, leyendas, cartas, poemas, recetas, noticias, afiches, etc.
• Los alumnos aprenden diferentes estrategias de lectura de acuerdo al tipo de texto, a su nivel de complejidad y al propósito con el que se lee.

Esto quiere decir que las destrezas del código escrito deben ser enseñadas de manera intencionada, no como secuencias aisladas, sino en el marco de actividades de interrogación y comprensión de un texto.
La fluidez lectora es el concepto que define las habilidades que se articulan para que un niño o niña pueda enfrentar la decodificación de un texto con la capacidad de construir significado y comprenderlo, velocidad lectora es uno de los indicadores en juego, por cierto el más fácil de medir para obtener un dato duro que es posible monitorear, esa es una de sus ventajas, pero a su vez es el menos orientador desde el punto de vista didáctico, por lo tanto, luego de lo desarrollado en las escuelas a partir de las primeras orientaciones SEP, estamos en condiciones de avanzar hacia la evaluación de la fluidez lectora, y ya no sólo obtener datos numéricos posibles de seguir, sino abrir reflexiones didácticas para tomar decisiones pedagógicas que nos permitan remediar los rezagos educativos de nuestros estudiantes.

Categorías de fluidez lectora:
• No lector: El niño o la niña no sabe decodificar ninguna estructura silábica, o bien sólo reconoce algunas letras aisladamente pero no es capaz de unirlas, en el mejor de los casos logra leer algunas sílabas aisladas simples (directas: Consonante+ vocal).
• Lectura silábica: El niño o la niña leen sílaba a sílaba, no construyendo las palabras como unidades.
o Ejemplo: La mesa está muy sucia. El lunes la voy a limpiar.
o El niño o niña leen: La‐me‐sa‐es‐tá‐muy‐su‐cia‐El‐lu‐nes‐la‐voy‐a‐lim‐pi‐ar.
• Lectura palabra a palabra: En este tipo de lectura el niño(a) lee las oraciones de un texto, palabra por palabra sin respetar las unidades de sentido.
o Ejemplo: El niño(a) lee: La‐mesa‐está‐muy‐sucia‐el‐lunes‐la‐voy‐a‐limpiar.
• Lectura por unidades cortas: En la lectura por unidades cortas el niño ya une algunas palabras formando pequeñas unidades.
o Ejemplo: El niño lee: La mesa‐está‐muy sucia‐El lunes la‐voy‐a limpiar.
• Lectura fluida: En la lectura fluida el niño lee en forma continua. Una buena lectura fluida implica dar una inflexión de voz adecuada al contenido del texto, respetando las unidades de sentido y la puntuación.
o Ejemplo: El niño o niña leen: La mesa está muy sucia. El lunes la voy a limpiar.

Definir en cuál de estos niveles se encuentran mis estudiantes es fundamental para la decisión y la elección del camino pedagógico que tomaré para apoyar sus aprendizajes.

En síntesis:
Considerando los planteamientos anteriores, es posible concluir que los niños y niñas aprenden y desarrollan el lenguaje oral y escrito más y mejor cuando en las actividades de aprendizaje:
Hay una vinculación con la realidad del que aprende porque:

• Se parte de su base cultural y sus conocimientos previos;
• Se considera como punto de partida el manejo del código lingüístico de los niños;
• Se apunta a su “zona de desarrollo próximo” (lo que el niños es capaz de hacer con apoyo o “andamiajes”);
• Lo que aprenden es significativo para ellos, porque se establecen claras relaciones entre lo que ya saben, con los nuevos conocimientos;
• Participan activamente en el logro de sus aprendizajes;
• Se aceptan y valoran sus diversos tipos de aportes, reforzando su autoestima; • Se aceptan diversos tipos de pensamiento: convergente, divergente y crítico.


Existe un clima favorable para los aprendizajes cuando:
• Hay un clima escolar grato dado las buenas relaciones entre docentes y estudiantes y de los alumnos entre sí; se promueve una comunicación en la que todos interactúan con respeto y afecto;
• Hay vinculación con las vivencias personales y con el entorno cultural, social y natural del que aprende;
• Existen propósitos claros para el que aprende;
• Se producen variadas interacciones entre los que aprenden (informales y grupos de trabajos organizados);
• Hay momentos de trabajo individual, grupal y colectivo;
• Hay momentos para trabajos libres y dirigidos;
• Hay un entorno escolar organizado e informativo.


Material para las educadoras y profesoras de primer ciclo.

Léalo y póngalo en práctica con sus alumnos y alumnas. Gracias.


Virginia Cartes Garrido
UTP Básica


Alto Hospicio, marzo de 2010.

No hay comentarios:

Publicar un comentario